¿Quién es Xangó?: Orisha mayor. Dios del trueno y del rayo, del fuego, de
la guerra, de la danza, de toda la música y de la belleza masculina. Abogado de
los guerreros y patrón de las tempestades. Después de Obatalá, Changó es el
orisha más poderoso y más venerado. Es un orisha que representa en él mismo un
gran número de virtudes e imperfecciones a la vez. Es valiente, buen amigo,
adivino y curandero, pero también es mentiroso, pendenciero, jactancioso,
mujeriego y jugador. Cuentan que Changó peleaba sin armas y que Osain, que era
su padrino, le preparó el secreto (ingredientes) del güiro, para que cuando lo
tocara con el dedo y se lo llevara a la boca, echara candela por ella. Así, con
el fuego, vencía a sus enemigos.
A pesar de este Pattaki,
existen sobre su origen diversas leyendas, algunas de ellas poco conocidas. Entre
los lucumies se dice que nació en la tierra y subió al cielo para convertirse
en Orisha, los bantús afirman que bajó del cielo siendo ya un orisha, un oba,
un rey. Posee un escudero o mandadero que responde al nombre de Orú. Tiene
miedo a la Ikú y respeta mucho a
Oyá. Es amigo de Elegguá y este lo es de él.
COLOR: Rojo; Rojo y blanco.
ATRIBUTOS: Espada (en ocasiones de madera y en otras de metal), el
hacha bipeine, de doble filo, siempre de madera liviana pintada toda de rojo
con la decoración en blanco, copa, caballo moro, un cetro de madera de palma y
cedro que termina en puntas agudas o en forma de doble hacha (oché) y Changó lo
lleva en la cabeza.